¿Estresado y cansado? ¡Alínea tu energía!

Estar sentado frente a una computadora todo el día, tener interminables reuniones vía zoom, atender clientes con una sonrisa permanente, resolver problemas y tomar decisiones complejas diariamente, sobre todo en estas épocas de pandemia, cansa mucho.

La incertidumbre cansa, el miedo a enfermarnos o a que lo haga un ser querido, los cambios de hábitos forzados, por supuesto que también cansan.

Si no atendemos las señales, el cansancio se acumula, aumentan el estrés y el mal humor y esto afecta enormemente nuestro rendimiento. Nos cuesta trabajo tomar decisiones efectivas, somos menos creativos y nos enganchamos en mucho más conflictos con la gente a nuestro alrededor, a veces por cosas que en otras circunstancias no tendrían importancia.  

Estoy segura de que te encantaría tomar una siesta, o mejor aún, una larga vacación, pero a falta de tiempo o de oportunidad, puedes probar unos sencillos ejercicios que te devolverán la energía que necesitas para dar el último jalón del año…

Realineación de energía:

Inhala profundamente 3 veces y revisa tu cuerpo.  Date cuenta en dónde se encuentra la tensión e inhala de nuevo profundamente, dirigiendo el aire hacia esa área. Deja salir el aire lentamente, imaginando que con tu exhalación estás liberando toda esa tensión, todas las toxinas que has acumulado en esa zona de tu cuerpo, y todo aquello que te hace sentir cansado y estresado.  Con cada inhalación, respira paz y serenidad, y libera la energía que tienes atrapada en tu cuerpo.

Repite esto hasta que te sientas mejor.

Ahora piensa en una ocasión en tu vida en la que te hayas sentido increíblemente bien, emocionado, y hayas tenido una gran cantidad de energía. Revisa ese recuerdo y revive esa experiencia, disfrutando la sensación que te producía. Fíjate cómo se siente eso en tu cuerpo y trata de recuperar las sensaciones con todos tus sentidos: qué oías, qué veías, qué sabores vienen a tu memoria.  ¿Recuerdas algún color, olor o textura en particular? ¿Estabas con alguna persona en especial, en un lugar específico?  permite que el recuerdo vívido inunde tu cara, tu espalda, tus manos, tus piernas. Tal vez sientas un cosquilleo, o calor.

Una vez que sientas esa energía, pon una mano sobre el corazón y la otra sobre tu estómago. Fija este momento en tu memoria, y recuerda que cada vez que necesites recuperarla, está al alcance de tus manos. Es todo lo que necesitas hacer: poner una mano en el corazón y otra en tu estómago, y tendrás esa energía que te hace falta para terminar tu día sintiéndote bien.

Y recuerda que no es necesario esperar para usar estas herramientas, a que ya estés al borde del colapso. hazlo un par de veces al día, todos los días, y verás resultados increíbles en tu estado de ánimo en general.

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