Porque para ser competitivos y enfrentar los retos que se les presentan día a día, líderes y colaboradores necesitan adquirir, mantener y multiplicar muchas habilidades:

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• comunicación efectiva y gestión de relaciones interpersonales

• trabajo en equipo, colaboración

• creatividad,

• buen manejo de recursos,

• inteligencia emocional (empatía, manejo del estrés, manejo de conflictos, etc.),

• planeación,

• delegación, etc. 

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Estas habilidades se aprenden o se multiplican; algunas las irán aprendiendo sobre la marcha, algunas se les dificultarán un poco más. Pero a través de actividades diseñadas para ello, su curva de aprendizaje se acorta de manera significativa, reduciendo además el nivel de frustración que conlleva el aprendizaje clásico por ensayo y error. 

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Por otra parte, darse tiempo para hacer un alto en la rutina diaria, permite la relajación del equipo, reducir sus niveles de estrés o aburrimiento, abrir foros de creatividad, de participación y solución de problemas sin la presión de que equivocarse puede traer altos costos.

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Toma acción. La inversión es realmente minúscula para los beneficios que traerá al equipo.  Recuerda que el precio es sólo por hoy.